Para nadie es un secreto que el 2013 fue un año difícil para el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Mancera. No obstante, a pesar de que dominaron las caras largas, algunas áreas de la administración capitalina entregaron buenas cuentas. Gracias a eso, la capital está en un carril correcto para que durante el año que empieza, el 2014, pueda darle vuelta a la página. Se pretende emprender un reencuentro de la ciudadanía con Mancera, que ha sido, casi lo olvidamos, el candidato más votado en la historia de la ciudad.
Una de esas áreas es la Secretaría de Turismo. Se le encargó a Miguel Torruco, que busca coronar en este cargo más de cuatro décadas dedicadas a la industria sin chimeneas. Su experiencia evitó que en la ciudad se registrara, en materia turística, una curva de aprendizaje. Al contrario, se emprendieron acciones inmediatas. Don Miguel aprovechó los días de asueto de fin de año para dar a conocer en las redes sociales, sobre todo en el Twitter, la relación de buenas noticias que el turismo dio a la ciudad, sus habitantes y autoridades el año pasado. Para el cierre del 2013, informó, la ocupación hotelera en la ciudad subió 8.6 por ciento y la captación de divisas 7.1
El Distrito Federal busca un perfil turístico distinto. Ya no quiere ser identificada como ciudad para hacer negocios, sino como destino cultural por excelencia. Es una decisión lógica pues se trata de una metrópoli con una cultura milenaria, que se fusiona con la vitalidad de la tecnología de última generación, la innovación y una política social de avanzada en el continente. Todo partió de la decisión de Mancera de ubicar al turismo como política pública prioritaria de su gobierno. No lo hizo en un discurso, sino en un acuerdo firmado ante cámaras y micrófonos y que se publicó en la Gaceta Oficial. En ese acuerdo se dio a paso a un rediseño institucional. Se ordenó la creación del Consejo Consultivo de Turismo, conformado por líderes de opinión y representantes de organizaciones del sector. De igual forma se puso en marcha la Comisión Ejecutiva de Turismo integrada por miembros del gabinete de Mancera con injerencia en la actividad turística. A lo que se sumó la Comisión Interdelegacional, con representantes de todas las demarcaciones políticas del DF.
Pasando al área de las acciones concretas, no hay que olvidar que Torruco encabezó una caravana de turisteros que recorrieron las 16 delegaciones para integrar el producto turístico. Otra acción relevante fue el diseño e impresión de folletos de promoción de la ciudad en ocho idiomas. Se puso en marcha el programa “Disfruta la Ciudad” que busca, por medio de promociones atractivas, que la ocupación turística no caiga en los fines de semana. Para los adultos mayores, sector relevante para las administraciones perredistas, se creó el programa “Hacer Turismo es Hacer Vida”, que ya benefició a 14 mil personas. Para el periodo de vacaciones de verano se implementó el programa “Sonrisas por tu Ciudad”, que alegró las vacaciones de más de 50 mil chilangos. Se instauró el premio “El Pochteca de Plata” para estimular a los prestadores de servicios que hacen contribuciones relevantes a la industria. Se lanzaron cuatro nuevas rutas del Turibús, que incorporan nuevos lugares a los recorridos tradicionales.
Se emprendió una agresiva campaña de promoción internacional, inusitada en la ciudad, con giras de trabajo por distintos países como Italia, Gran Bretaña o Rusia. Lo importante ahora es darle continuidad al esfuerzo. No valen las pausas ni los paréntesis. Lo que procede es intensificar las acciones que han dado resultados positivos y ajustar aquellas no que no han funcionado como se esperaba.