El primero, elevar el nivel de vida de la sociedad; pero no de toda, sino sólo de aquella (es de presumir) ajena a los rencores de merma en sus intereses, cuya inconformidad ha estimulado la protesta social según se ha dicho ya hasta el cansancio.
Fiel a su costumbre de enumerar los compromisos sobre cuyo contenido basará programas y obras de gobierno, el presidente Enrique Peña ha ofrecido en un mensaje de inicio de año un listado de siete puntos indeclinables, con dos aspectos fundamentales.
El primero, elevar el nivel de vida de la sociedad; pero no de toda, sino sólo de aquella (es de presumir) ajena a los rencores de merma en sus intereses, cuya inconformidad ha estimulado la protesta social según se ha dicho ya hasta el cansancio.
En ese sentido el gobierno (como Rey Mago en compra dominical apresurada, como suelen hacer las mamás omisas hasta el límite del tiempo cuando ofrecen su reino por una muñeca) sale de compras y ofrece gratuitamente diez millones de televisores para otras tantas familias de escasos recursos, como se llama eufemísticamente a los pobretones.
Promete también el Presidente, no obstante, la rendija abierta por la Secretaría de Hacienda, el último gasolinazo de la cumbancha; o sea, este más reciente y contundente y de paso les dice a los ciudadanos sobre su compromiso contra la corrupción y la impunidad.
Buenos propósitos en lugar de lista de peticiones a los Magos de Oriente, antes de entrevistarse con el hombre de la Casa Blanca (la otra) con quien hablará de todo menos de televisores digitales o alzas a la gasolina. La violencia peligrosa en el traspatio será la queja del señor Obama y para el adobo de los boletines se escribirán líneas emotivas en torno de los perdones a migrantes cuya expulsión se difiere. Pero del fondo ominoso de las razones de la reunión, ni media palabra. Todo quedará en el sigilo y el secreto de una reunión de Estado en el filo de los peligros.
Y por si usted no los conoce, estos son los puntos esenciales del mensaje de año nuevo. Usted dirá:
“… Por eso, este año lo estamos iniciando con 7 Acciones en favor de la Economía Familiar:
Por la reforma energética, al iniciar 2015, bajaron las tarifas de luz en todo el país, tanto para los hogares como para los negocios.
Gracias a la reforma hacendaria, por primera vez en cinco años, ya NO habrá incrementos mensuales a los precios de la gasolina, el diésel y el gas LP.
Gracias a la reforma de telecomunicaciones, por primera vez, toda llamada nacional será como una llamada local.
En 2015, más de 10 millones de familias de escasos recursos recibirán una televisión digital, totalmente gratuita.
Gracias a la reforma financiera, jóvenes mexicanos, de 18 a 30 años, que quieran abrir un negocio o hacer crecer el que ya tienen, recibirán apoyos.
Este mes lanzaremos un Paquete de Medidas Fiscales y de Financiamiento, para impulsar el desarrollo de vivienda, lo que también ayudará al desarrollo de la economía en su conjunto.
A partir del primer día de este año, las actividades agropecuarias de Chiapas, Guerrero y Oaxaca ya cuentan con un trato fiscal preferencial.
Estas 7 acciones representan buenas noticias para la economía familiar y son el inicio de un mejor año para México. Como Presidente de la República, seguiré trabajando con determinación, firmeza y claridad en el rumbo; poniendo todas las reformas en acción”.
