EL CAMBIO ELECTORAL EN LA CIUDAD DE MEXICO
Los capitalinos, los habitantes de la ciudad capital de la República Mexicana han vivido esta última década una serie de cambios y transformaciones en lo social, en lo político e incluso en el medio ambiente.
La sobrepoblación de la ciudad de México la ha convertido en una entidad con problemas, deficiencias y necesidades múltiples; los espacios habitacionales han crecido de manera vertiginosa, la contaminación se ha incrementado, el consumo y desperdicio de agua ha provocado alertas para el futuro próximo y grandes gastos en la infraestructura y su mantenimiento, el transporte público a pesar de los esfuerzos innovadores, es insuficiente y un reto permanente para la movilidad de sus habitantes, la seguridad pública es un desafío diario que ha requerido de grandes aplicaciones tecnológicas, la convivencia social es cada día más complicada. Sin olvidar que aun a pesar del crecimiento desmedido la Ciudad de México cuenta con una importante estructura para el desarrollo cultural y el entretenimiento y con oportunidades para el empleo y la educación.
En lo político y en la forma de gobierno de la gran metrópoli, se inició una transformación paulatina hasta llegar a la elección directa de sus gobernantes, los partidos políticos y los grupos más necesitados tuvieron cabida en algunas decisiones de los distintos gobiernos. Como peculiaridad los partidos llamados de izquierda fueron elegidos por los habitantes y han prevalecido en las preferencias electorales.
Durante décadas desde la academia y en distintos foros públicos, diversos grupos sociales venían proponiendo nuevas reformas para transformar el régimen jurídico-político de lo que fuera el Distrito Federal, que tenía un status sui generis al ser sede de los poderes de la Unión y capital del país.
Durante este proceso se registraron propuestas de cómo transformar al Distrito Federal, sentando finalmente las bases constitucionales para la reorganización política y jurídica de la Ciudad de México, convocando a la elección de una Asamblea Constituyente para elaborar la Constitución Política de la Ciudad de México, hecho inédito e histórico en nuestro país.
Aprobada la Constitución de la Ciudad de México, que establece mayor autonomía y una nueva distribución de competencias entre autoridades locales y federales y define que los ciudadanos de la capital tendrán derecho a elegir a través del voto directo a sus diputados locales y federales, senadores, gobernador de la Ciudad, delegados, ahora alcaldes de las 16 entidades delegacionales de las ciudad y cabildos en cada demarcación.
Por lo tanto, la elección en la Ciudad de México, después de la presidencial, es la que atrae mayor atención.
La razón es sencilla, el mandatario de la ciudad se convierte en figura nacional y casi de manera automática en aspirante a la Presidencia de la República, como es el caso de Miguel Ángel Mancera, y antes lo fue de Marcelo Ebrard, Andrés Manuel López Obrador y Cuauhtémoc Cárdenas.
Los observadores políticos afirman que el rasgo distintivo de la elección del año que entra en la capital será la lucha entre dos partidos PRD y MORENA que aseguran protagonizarán una lucha descarnada y con su estilo ( manifestaciones violentas, agresiones y provocaciones a la autoridad, reclamos estridentes..etc.) pueden generar un clima de agitación permanente que será nocivo para los renglones económico y turístico de la metrópoli. No hay que olvidar que PRD y MORENA no hacen mucho eran lo mismo. Por lo que se supone su lucha fratricida será mucho más violenta.
El partido escriturado a favor de López Obrador ya tiene candidata, la delegada en Tlalpan, Claudia Sheinbaum, que arranca la carrera como favorita y con ventaja, que hasta hace poco era muy amplia, pero que hoy, se está cerrando a causa primero de los problemas con Ricardo Monreal y después por los efectos devastadores del sismo que la desgastaron fuerte. Ha sido una prueba difícil que a Claudia le ha costado mucho superar.
El Frente Amplio Ciudadano todavía no decide su candidato, aunque reiteradamente se ha mencionado a Alejandra Barrales, dirigente nacional del PRD, como puntera, aunque hasta esta fecha no se ha definido, por lo que se cree que todavía no la tiene asegurada su postulación. El PRI, por su parte, realizó un movimiento sorpresivo, de alto impacto, al colocar al exgobernador del Edomex, Eruviel Ávila, como delegado especial y responsable de la organización de su partido en la Ciudad de México. Se interpretó como el adelanto de que el PRI siente que puede competir y que el candidato será alguien del más alto nivel, un cuadro salido del gabinete presidencial, por ejemplo el Dr. José Narro, Enrique de la Madrid o Rosario Robles y recuperar votos en la Ciudad de México, al parecer la idea es aprovechar los espacios que dejarán PRD y Morena en su enfrentamiento electoral.
Por su parte Ricardo Monreal, delegado en Cuauhtémoc y quien parecía el candidato natural de MORENA para la Ciudad de México, fue desbancado por decisión de López Obrador y varios partidos le han ofrecido su respaldo ya que se piensa que puede ser un candidato ganador. Monreal no ha decidido si acepta postularse o sigue fiel a la voluntad de López Obrador. En breve según afirmó el delegado en la Cuauhtémoc definirá su postura ante la elección, por lo que habrá que esperar.
Para participar como candidatos independientes han sido aceptadas las solicitudes de Lorena Osorio, Hugo Rodríguez Barrios, Humberto García Montes y Xavier González Ziran, quienes ya trabajan en la recopilación de 74 mil 546 firmas necesarias para su registro.
Finalmente, en el 2018 los capitalinos votaremos por nuestros representantes y la Ciudad de México estrenará Constitución…… que todo sea para bien.
ALFARO DOMINA, VERGARA AMAGA
La elección en Jalisco es también una de las más importantes a nivel estatal del año próximo. Su padrón electoral cuenta con más de 5.7 millones de personas. En la actualidad está gobernado por el PRI, con Aristóteles Sandoval, que llega relativamente bien al tramo final de su mandato.
El PRI tiene control en la mitad de los 125 municipios de Jalisco, pero la oposición en varios de los más importantes, comenzando por Guadalajara cuyo alcalde, Enrique Alfaro, de Movimiento Ciudadano está a la cabeza de los aspirantes a la gubernatura. .
Alfaro es de las cartas más fuertes de Movimiento Ciudadano, el partido de Dante Delgado. El PRI tiene un Jalisco un cuadro nacional, Arturo Zamora, dirigente de la CNOP. Tiene aquí responsabilidades mayúsculas en el sector popular del partido pero es un fuerte aspirante. Del gobierno estatal, la pregunta es qué tanta libertad tendrá el gobernador para proponer a su partido algún candidato. Del PAN hay un grupo en el que están los exgobernadores Ramírez Acuña y Alberto Cárdenas que quieren un candidato propio y no irse con Alfaro.
El PRD tiene poca presencia de manera que para ellos, incluyendo el PAN, es una suerte que Alfaro pudiera ser candidato del Frente que integraron con Movimiento Ciudadano. De Morena se habla poco, después de haber pensado en algunos empresarios que no son bien vistos socialmente. Últimamente en la prensa local se habla mucho del empresario Jorge Vergara, dueño de las Chivas y de la empresa Omnilife y se piensa que debido a que el nivel de conocimiento público es muy alto, podría competir contra Alfaro.