El desfile anual de la fundación de la República Popular China, que se celebra cada 1 de octubre, conmemoró ayer el 70 aniversario del régimen chino, una ocasión que el dictador Xi Jinping celebró con una gran exhibición de poderío militar con el mayor desfile de su historia por en las calles de Pekín.
El ejército chino, engalanado de rojo, marchó por la avenida Changan hasta la plaza de Tiananmen, ante la atenta mirada de Xi y de la plana mayor del Partido Comunista Chino (PCCh).
El mandatario chino aseguró que “ninguna fuerza podrá nunca hacer flaquear la posición de China o detener al pueblo y a la nación china en su camino hacia adelante”, al tiempo que el desfile mostraba algunos de los avances militar del gigante asiático.
Entre los juguetes de guerra que mostró el Ejército se encuentra el nuevo Dong Feng 41, un misil balístico intercontinental con capacidad para múltiples cabezas nucleares que podría alcanzar cualquier parte de Estados Unidos con una precisión en su objetivo de 100 a 500 metros.
Enfundado en un traje Mao gris, Xi Jinping aseguró que la revolución comunista “transformó completamente el miserable destino de China de ser pobre, débil y humillada durante más de cien años”, lo que provocó un estallido de aplausos de los miles de asistentes.
El mandatario zanjó exigiendo que el pueblo chino se mantenga “unido en torno al PCCh”, y lanzó un mensaje a sus colonias Hong Kong y Macao, asegurando que China “mantendrá “la estabilidad y la prosperidad duraderas” en los dos territorios.
BATALLA CAMPAL. Mientras se desarrollaba el desfile, precisamente en Hong Kong acontecía una verdadera batalla campal entre miles de manifestantes, que aprovecharon la ocasión para hacer oír de nuevo sus reivindicaciones prodemocracia, y la policía.
Los más radicales provocaron escenas de caos levantando barricadas, generando incendios y aventando objetos y cocteles molotov al mobiliario y los agentes.
El diario South China Morning Post informó que hubo 96 detenidos, —que pueden enfrentar hasta 10 años de cárcel—, el número más alto de detenidos en cuatro meses de protestas.
HERIDO CRÍTICO DE BALA. Los disturbios dejaron 31 manifestantes heridos, dos de ellos, graves. Uno de éstos, precisamente, resultó herido por un disparo de bala de un policía, lo cual es la primera vez que ocurre en la excolonia británica.
Hacia las 16:15 de la tarde, como quedó registrado en video, un joven estudiante de secundaria, identificado como Tsang Chi-kin, de 18 años, se abalanzó sobre un agente con un palo, y éste reaccionó disparándole a quemarropa. Tsang tiene una herida de bala en el pecho, a tres centímetros del corazón, y cuatro horas después de recibir el disparo del policía, seguían operándolo de urgencia en el hospital.
ADVERTENCIA. En respuesta al disparo, la superitentente de la policía hongkonesa, Yolanda Yu Hoy-kwan, escribió que están “muy tristes” por lo sucedido, pero aprovechó para agregar: “Advertimos a los alborotadores de que dejen de incumplir la ley, porque la haremos cumplir de manera estricta”.
La ONG Human Rights Watch denunció que la respuesta policial no fue “apropiada”.
LA POLICÍA HONGKONESA USA MUNICIÓN REAL POR PRIMERA VEZ CONTRA ACTIVISTAS. Por primera vez en su historia, la policía de Hong Kong usó ayer un arma de fuego real contra un manifestante. Y lo hizo con un disparo a bocajarro, contra un estudiante de 18 años, que quedó registrado en video.
“Me duele el pecho, llévenme al hospital. Necesito ir al hospital”, se escucha gritar a Tsang Chi-kin en las imágenes, mientras yace en el piso con sangre brotándole del pecho.
Las autoridades confirmaron que, ayer en la noche, se encontraba en estado crítico, aunque hubo otro manifestante herido crítico en los graves disturbios ocurridos ayer en la excolonia británica.
UN MISIL CAPAZ DE IMPACTAR EN CUALQUIER CIUDAD DE ESTADOS UNIDOS. En el desfile militar de este martes, Pekín presentó en sociedad el misil balístico intercontinental Dong Feng 41, que puede transportar varias ojivas nucleares y que sería capaz de viajar entre 12 mil y 15 mil kilómetros, es decir, que podría alcanzar cualquier punto de Estados Unidos. Además, lo haría con una precisión de entre 500 y 100 metros del objetivo marcado.
Pero además de este impresionante misil, el régimen de Xi Jinping también mostró los nuevos tanques ligeros ZTQ-15, y drones furtivos de última generación, como el Gonji-11, entre otras 580 unidades de armamento y material bélico.