Tres piezas del acervo del Museo Nacional de San Carlos (MNSC), examinadas histórica, física y químicamente, son el hilo conductor de la exposición Secretos del arte. Historia y ciencia para el estudio de la colección del Museo Nacional de San Carlos, que a partir del 21 de octubre se presenta en ese espacio museístico.
Carmen Gaitán, directora de ese espacio museístico, comentó en conferencia de prensa que la exhibición ofrece el trabajo minucioso que se efectuó a tres obras de los siglos XVI y XVII, donde se observa un proceso minucioso de estudios a dichas piezas.
“La psicología, las capas pictóricas, los arrepentimientos de los pintores y esto se puede leer como si fuera un paciente, igual que nosotros. Lo que ocurrió con las obras, es toda una tomografía, un estudio quirúrgico, atravesaron por procesos que, para nosotros dentro del museo, fue realmente una experiencia novedosa, nunca habíamos visto un equipo de laboratorio tan sofisticado y completo como el de Estéticas de la UNAM.
El Instituto de Investigaciones Estéticas y el Posgrado en Historia del Arte de la UNAM realizaron, bajo la dirección de las doctoras Elsa Arroyo y Clara Bargellini, estudios de técnicas de registro de imagen y análisis de obras por métodos no destructivos a tres piezas: La Virgen de la leche, Las siete virtudes y El entierro de Cristo.
En el caso de La Virgen de la leche se pudo confirmar la atribución al pintor florentino Jacopo Pontormo, a través de un acercamiento a las técnicas y materiales usados en la creación de la obra. De ahí se pudo profundizar en el significado de la composición en su contexto religioso y cultural.
Para Las siete virtudes aún no puede ser atribuida con seguridad a su supuesto autor, Pedro de Campaña, por tratarse de un artista poco conocido. Sin embargo, la historia compleja de los cambios en la pintura, a través del tiempo, es sumamente instructiva. La ciencia permitió detectar las alteraciones en la obra y hasta proponer una aproximación a los colores originales.
La tercera pintura, El entierro de Cristo, basada en una obra de Caravaggio, se enfrenta al problema de la copia en la historia del arte, un tema de gran interés para ese artista en particular, pero también para la historia de la pintura en la Nueva España y en el México del siglo XIX, cuando nuestros artistas conocían pocas obras europeas originales.